Desde hacía tiempo quería incluir alguna receta más fitness o sana en el blog y por eso al final me he decantado por empezar con uno de mis postres favoritos, el brownie. El resultado es fantástico y tiene muchas menos grasas. Obviamente, no es como el original. Evitamos la mantequilla y el azúcar, algo que siempre otorga jugosidad, pata sustituirlo por opciones más secas. El resultado no es tan jugoso pero está delicioso y os va a encantar.
La receta es una adaptación de la que encontraréis en el libro ¡No hay excusas! de Francesc Gascó. Y digo adaptación porque me he tomado la libertad de añadirle el toque de naranja. Ya sabéis que la mezcla de chocolate y naranja es una de mis favoritas y es una apuesta segura. Admito que la opción de la avena me encanta y que no será la última vez que lo pruebe en casa... ¡Ahora sois vosotros los que tenéis que animaros!
Tengo en mente varios postres y dulces que sé que os van a encantar y vais a echar mano de ellos este verano: smoothies, batidos, polos... A ver si saco el tiempo necesario para poder hacerlos... ¡Que esa es otra! Hasta entonces, podéis deleitaros con este delicioso brownie de naranja y avena. ¡A disfrutar!
Brownie de naranja y avena {Fitness}
Dificultad: Fácil
Tiempo horneado: 20 mins (aprox)
Raciones: 12
Etiqueta: Fitness, Postre, Aperitivo
Trotamundos: EEUU y Canadá
Adaptación: ¡No hay excusas!, Francesc Gascó
Siete claras de huevo
200 gr de harina de avena
Un puñado de copos de avena
10-14 nueces peladas
45 gr de chocolate negro sin azúcares
35 gr de cacao en polvo puro sin azúcar
10 ml de edulcorante líquido
Una cucharadita y media de levadura en polvo
Un chorrito de leche de soja
Zumo de una naranja
Ralladura de una naranja
- Comenzamos precalentando el horno a 180ºC. Engrasamos un molde redondo con un pelín de aceite de oliva.
- Tamizamos la harina de avena con el cacao y la levadura. Reservamos.
- Batimos las claras con la harina de avena, levadura y cacao, el edulcorante, el zumo de naranja y la ralladura. Lo podemos hacer a mano o con una batidora. Yo prefiero hacerlo a mano para que no entre mucho aire.
- Añadimos un chorrito de leche.
- Partimos el chocolate negro en trocitos para añadirlo a la masa. No tienen que ser minúsculos, pero tampoco enormes.
- Añadimos un puñado de copos de avena y parte de las nueces. Guarda algunas para decorar.
- Mezclamos todo bien. Lo vertemos en el molde y añadimos las últimas nueces.
- Horneamos durante 20 minutos, aproximadamente, hasta que al pinchar con un palillo este salga limpio.
- Dejamos en friar. Consumimos cuando haya enfriado por completo.
¡A disfrutar!
Fuente: este post proviene de Jaleo en la Cocina, donde puedes consultar el contenido original.
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